Luego que el alcalde de Maracaibo, Willy Casanova y el secretario de la gobernación, Lisandro Cabello, acusaran a Fedecámaras Zulia de promover el impago de la Ordenanza de Actividades Económicas aprobada el pasado 28 de diciembre por la Cámara Municipal y además amenazara con actuar con todo el peso de la ley, el segundo vicepresidente de Fedecámaras Zulia, Ricardo Acosta Cedeño, catalogó la acción como «irracional».
A su juicio, es un «grito desesperado» de llamar la atención «nunca hemos llamado a un impago, estamos denunciando las fuertes medidas tributarias que establecieron sin consultar con los afectados», indicó que la ordenanza «obliga a pagar esté vendiendo o no, solamente por estar el establecimiento abierto lo obligan pagar mensual 15 petros que representa Bs S 540.000, eso busca asfixiar al pequeño comerciante en Maracaibo».
Por esta acción 2.000 comercios se han visto afectados «sus ganancias no dan para entregarle al municipio casi la totalidad de la ganancia, es una locura» destacó que, si bien es cierto la alcaldía busca aumentar la recaudación para mantener la ciudad, el gobierno ha creado una crisis económica sin precedentes y «las empresas están subsistiendo».
El empresario durante una entrevista para el programa Análisis de Entorno de Fedecámaras Radio, informó que, han tratado de comunicarse con el director de Hacienda Municipal pero no ha atendido las llamadas y mensajes.
Según la información que maneja Acosta Cedeño «los pequeños comerciantes no han ido a cancelar, los que si han cancelado es la mediana y gran empresa».
Por último, desmintió que 60 fiscales del Servicio Desconcentrado Municipal de Administración Tributaria (Sedemat) realizarán inspecciones para verificar que las empresas y comercios que hacen vida en Maracaibo estén cumpliendo con la reforma a la Ordenanza «ningunos fiscales han salido a la calle, no es cierto y esperaremos a ver porque automáticamente al que le lleguen lo que van a hacer es bajar las santamarías».
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