Los problemas que agobian el país como son la escasez de alimentos, falta de transporte, la delincuencia desbordada y los constantes cortes de agua y luz, que vive el país también afecta a los trabajadores de Petróleos de Venezuela (PDVSA). La pérdida de la calidad de vida de los asalariados, ha llevado a los diferentes sindicatos del país a recolectar firmas para declarar estado de emergencia laboral dentro de la estatal.
“El contrato colectivo petrolero recién firmado, no alcanza para que los trabajadores de PDVSA logren llevar comida a sus casas, los obreros de las diferentes asambleas que conforman Petróleos de Venezuela se encuentran recolectando firmas para la rectificación del contrato colectivo y la activación de un estado de emergencia laboral”, afirmó Eudis Girot, director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (@FUTPV).
Según datos del Director Ejecutivo de la FUTPV, el salario diario de un obrero que comprende un horario de 7a.m. a 5p.m. es de 59.000.000 bolívares diarios y unos 295.000 bolívares semanales. Mientras que un licenciado o ingeniero de la estatal devenga cerca de 640.000 bolívares quincenales.
«La miseria está atacando a los trabajadores petroleros, los asalariados se encuentran en un estado de indistinción, desánimo y desesperanza, los salarios actuales no alcanzan para adquirir los alimentos básicos necesarios» agregó el director.
Ante las exigencias el ministerio de trabajo y la presidencia de la compañía han hecho caso omiso a las solicitudes de los trabajadores, mientras que PDVSA día a día reduce de manera exponencial la cantidad de barriles diarios producidos.
“El clamor a las autoridades ha sido reiterado, es imposible revivir la producción de crudo si no se estimula primero el mejoramiento de la calidad de vida de los asalariados”, agregó Girot, durante una entrevista con Andrés Rojas Jímenez y Liliana Cadenas, durante el programa “Portales” con Petroguía.
“PDVSA es una hoya de presión que está explotando por pedazos”
Las refinerías de Cardón y Amuay se encuentran trabajando entre un 10% y 15% de su capacidad, mientras que las refinerías de Puerto la cruz y el Palito se encuentran paralizadas, según datos de Girot.
El sindicalista concluyó que la caída de la producción de barriles diarios es por la falta de mantenimiento y de reinversión dentro campo petrolero. Donde la gerencia de PDVSA se ha encargado de desmantelar y acabar con la compañía, incluso hoy en día.
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