La FEDERACIÓN DE CÁMARAS Y ASOCIACIONES DE COMERCIO Y PRODUCCIÓN DE VENEZUELA (FEDECÁMARAS), atendió a la reunión de cortesía convocada por el Ministro del Poder Popular para el Proceso Social de Trabajo, Néstor Ovalles, convencida de la necesidad de restablecer el diálogo social tripartito en el país, en los términos definidos por la Organización Internacional del Trabajo (OIT): un diálogo respetuoso con resultados concretos y oportunos, en pro de la atención de las necesidades de nuestra población.

Durante el encuentro, Fedecámaras reiteró ante el Ministerio, la necesidad de recuperar la producción, la inversión, la confianza, promover la libre iniciativa y restablecer el diálogo social, como único camino para rescatar la economía de nuestro país y con ella el poder adquisitivo de los venezolanos.

A pocas horas de realizarse la reunión, se producen acusaciones contra Fedecámaras y sus organizaciones afiliadas por parte de voceros gubernamentales o grupo vinculados al oficialismo, incluyendo miembros de la Asamblea Nacional Constituyente, que la responsabilizan de la supuesta guerra económica, de la crisis del país, de la pérdida del poder adquisitivo del salario y de promover el alza descontrolada del dólar con fines políticos. Así mismo, se realizaron llamados al pueblo para movilizarse en contra de Fedecámaras y se instó a los entes oficiales a apresar a sus dirigentes, lo cual en efecto, generó movilizaciones contra Fedecámaras, en sus sedes del estado Bolívar y Caracas.

Fedecámaras rechaza la campaña de descrédito que mantiene el gobierno en su contra y lo exhortamos al cese de la intimidación y ataques contra de la organización empleadora más representativa del país, y a avocarse de manera inmediata a solucionar la situación económica que agobia a Venezuela.

Es necesario generar las condiciones de confianza y respeto indispensables para perfilar un proceso de diálogo social, creíble y efectivo entre Gobierno, trabajadores y empleadores, como lo establecen las recomendaciones y Convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), especialmente, los Convenios 87 sobre Libertad Sindical y 144 sobre Consulta Tripartita. Recordemos que Venezuela tiene más de 18 años sin celebrar una reunión tripartita: Gobierno, Fedecámaras y una representación plural de sindicatos de trabajadores.

Este lunes 30 de octubre en Ginebra, Suiza, se inició la 331ª reunión del Consejo de Administración de la OIT, y el Gobierno se encuentra en mora ante el organismo internacional, pues está comprometido en presentar un plan de acción que incluya una mesa de diálogo entre el Gobierno y Fedecámaras, con la asistencia de la OIT para tratar, en un ambiente neutral, plural y equitativo, una agenda concreta de temas de interés común, que aún no se ha logrado acordar.

La falta de diálogo social ha repercutido negativamente en el mundo laboral, tanto a los empleadores como a los trabajadores, pues no ha permitido llegar a los acuerdos indispensables que apunten a la solución de la grave crisis económica y de desabastecimiento existente en el país, generando una merma cada vez más pronunciada y frecuente en el número de empresas operativas, sobre todo de las pequeñas y medianas que representan el 80% del tejido empresarial, haciéndose la situación insostenible, con un severo impacto en el número y calidad de los empleos.

Fedecámaras confía en que el Gobierno comprenda la necesidad del verdadero diálogo social y en que las reuniones aisladas, sin agenda ni contenidos específicos puedan transformarse, prontamente, en una dinámica permanente de diálogo social efectivo, de manera de alcanzar soluciones que se traduzcan en una mejora sustancial de las condiciones de calidad de vida de todos los venezolanos.