Productores y campesinos solicitan a las autoridades nacionales implementar planes que impulsen el desarrollo y la sostenibilidad de la siembra de piñas en la región que se ha convertido en uno de los motores económicos de la zona.
La producción de piñas en el estado oriental está ligada al sustento de numerosas familias campesinas y es una fuente de empleo de más de 100 productores de Guirintal, Quetepe, Tocuchare, Sotillo y Barranquín que se dedican a cosechar y vender la apreciada fruta.
Los productores esperan los buenos resultados del último cultivo de piñas para los meses de septiembre a noviembre, una producción que varía según la estación del año y el tamaño del fruto, así lo explica, Cruz Arsenio, productor de piñas. “Las ventas de piñas también son una fuente de empleo para los pobladores que esperan a los turistas que transitan por las carreteras del estado Sucre”.
Juana Gómez, vendedora del fruto, aseguró que tienen bastante movimiento de turismo “y, por lo general es una piña que se vende mucho por su calidad. Es muy dulce y ahorita en este mes está un poco costosa porque no hay esa cantidad de piñas que por lo general siempre hay en otros meses”.
La piña es una fruta tropical que crece en climas cálidos, siendo el estado Sucre una de las regiones donde se cultiva la apreciada variedad conocida como “Pilón” o “cabezona”.
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