Posterior a los anuncios realizados por el Ejecutivo Nacional el pasado 20 de agosto, el fenómeno hiperinflacionario sigue vigente en la economía venezolana. El alza de los precios se ha vuelto un asunto semanal, la escasez de productos es aún mucho mayor y el poder adquisitivo de los venezolanos se ha visto totalmente destruido pese a que el salario mínimo, en dichos anuncios, tuvo un aumento de más de 60 veces su valor.
En este sentido, el presidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal explicó en el programa «Portales» con Actualidad Laboral que el aumento del salario mínimo se hizo como todos los anteriores, de manera inconsulta, sin cumplir lo establecido en las normas y convenios suscritos ante la OIT, los cuales establecen que los aumentos deben ser consultados con los empleadores y trabajadores, además no vienen acompañados de ninguna medida de fondo como lo es el aumento de la producción nacional o la eliminación del control cambiario.
Informó Larrazábal, que lo único que generaron las medidas anunciadas en la población venezolana, es pura desconfianza. El Gobierno espera que las personas dependan de los bonos y subsidios que ofrecen, sin embargo “la reflexión que hace Fedecámaras es que las personas deben depender de ellos mismos, del esfuerzo y los trabajos que puedan realizar”.
Pago de los salarios mínimos a empresas privadas es un “descontrol total”
De igual manera, el líder gremial sentenció que muchos trabajadores que se encuentran registrados en la plataforma “Tiuna”, recibieron doble pago, tanto por parte de la empresa para la cual trabajan como por parte del Ejecutivo Nacional; sin embargo, “muchos afirmaron que este último pago, solo lo recibieron en la primera quincena de septiembre, es decir, un descontrol total”, añadió.
Las empresas para cubrirse jurídicamente, decidieron revisar si los empleados estaban o no registrados en dicha plataforma, puesto que esto puede ser considerado como“estafa al Gobierno”, perjudicando tanto al empleador como al trabajador.
Duro golpe al poder adquisitivo de los venezolanos
Por otra parte, el poder adquisitivo de los venezolanos, cada vez está siendo más golpeado por la hiperinflación. El presidente de Fedecámaras destacó que “hace 30 días el nuevo salario mínimo tenía un poder de compra equivalente a 30 dólares, pero ahora, este mismo sueldo, tiene un poder de compra correspondiente a 9 dólares”. “Hay que concentrarse en recuperar el poder adquisitivo de la población, no hay que bajar la guardia, hay que seguir produciendo con lo que se tenga y abastecer los mercados con lo que podamos”, puntualizó el dirigente gremial.
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