Cada día es más difícil mantener a los empleados comprometidos con las empresas o instituciones en Venezuela ya que muchos sienten que no son bien remunerados. Así lo afirmó el grupo consultor PGA Group a través del Estudio Coyuntura Organizacional 2017, que evalúa el capital humano y lo difícil de su retención en el país.
«Hoy por hoy la retención en el país tiene una complejidad distinta porque ya no es solo competir entre empresas sino competir contra empresas foráneas, condiciones que están fuera del país y elementos que hacen que el talento no vea acá posibilidades de desarrollo», aseguro Iván Acosta, representante de PGA Group.
En conversación con Noemí Cendón y Janeth De Abreu del programa Actualidad Laboral, Acosta indicó que uno de los mayores problemas es que ni los trabajadores ni los empresarios se sienten satisfechos con lo que ganan, la sociedad venezolana se ha metido en un hueco económico importante donde nada de lo que hacemos es retribuido adecuadamente.
«El compromiso que el empleado adquiere con el empresario es entendiéndolo en esas condiciones que ya son precarias. Es decir, no le puedo estar pidiendo que me da más de esto porque casi no puede operar y de broma puede garantizarme ciertos ingresos constantes y seguro de manera mensual. El trabajador conoce que pedir más es casi imposible», afirmó el representante.
Asimismo, Acosta comentó que otro de los retos que asumen las empresas una vez que consiguen un recurso (empleado) que no está pensando salir del país, es poder conectarlo con la razón de ser del negocio, motivarlo para que se concentre y sea suficientemente productivo a pesar de la situación tan difícil que afronta el país.
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