Rector de la UCV ante medida del CNU: “No se trata simplemente de abrir las puertas para que entre todo el mundo”

El rector de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Víctor Rago, calificó este lunes de «infortunada» la decisión del Consejo Nacional de Universidades (CNU) de eliminar las pruebas interna de ingreso en las casas de estudios públicas.

Rago afirmó que la medida ignora asuntos estructurales como la prosecución académica de los estudiantes, lo cual la convierte en simplificación de un fenómeno mucho más complejo.

“No se trata simplemente de abrir las puertas para que entre todo el mundo”, dijo el rector en entrevista con el programa Shirley Radio.

Subrayó que los instrumentos de admisión desarrollados por las universidades autónomas buscan precisamente facilitar el acceso con garantías de continuidad académica.

Alertó que retomar la resolución de 2015, base de la decisión actual, “priva a las universidades de la posibilidad de diseñar sus propios mecanismos de ingreso”.

Ley de Universidades protege la autonomía en materia de admisión

Rago citó los artículos 20 y 26 de la Ley de Universidades para destacar que esas instituciones autónomas tienen la potestad de definir la forma en que admiten a sus estudiantes.

“Aunque el artículo 20 de la Ley de Universidades establece que para la admisión en los estudios de educación universitaria deben seguirse las pautas establecidas por el órgano rector del Ministerio de Educación Universitaria a través del CNU, en el caso de las universidades autónomas esas pautas funcionan como una orientación general, como una recomendación, y el artículo 26 establece a las universidades la función de determinar el número de estudiantes que ingresan a los estudios y la forma de hacerlo”, subrayó.

A su juicio, con la nueva disposición se corre el riesgo de “vulnerar sin justificación la autonomía universitaria, ya muy menoscabada”.

No se trata de pruebas excluyentes, sino complementarios

El rector de la UCV rechazó señalamientos del ministro de Educación Universitaria, Ricardo Sánchez, en el sentido de que las universidades pretenden “ponerse al margen de las disposiciones constitucionales”.

Afirmó que “no se trata de pruebas excluyentes, sino de mecanismos complementarios”, y recordó que el propio Sánchez ingresó a la UCV mediante uno de esos mecanismos: el programa Samuel Robinson.

“Las universidades no son pruebas excluyentes, eso hay que decirlo, hay que replicarle a eso asegurando que no se trata de pruebas excluyentes. Se trata de mecanismos complementarios y yo lo señalé al ministro expresamente durante mi intervención en la sesión del CNU”, manifestó.

La medida del CNU, que elimina las pruebas internas como mecanismo de ingreso en las universidades públicas, se fundamentó en un documento presentado durante la sesión de ese organismo por la Asociación de Rectores Bolivarianos, el cual –según Rago– no era conocido por otros miembros.

En un escenario donde según el rector “existe una abrumadora mayoría de universidades identificadas políticamente con el gobierno”, el resultado de la votación ya parecía definido.

Destacó que la medida tiene una serie de implicaciones y circunstancias que hacen que deba ser examinada.

Altan sobre deserción universitaria

El presidente de la Asociación de Profesores de la UCV (Apucv), José Gregorio Alonso, señaló que la mayoría de los cupos son asignados por el Consejo Nacional de Universidades (CNU) a través del Sistema Nacional de Ingreso de la OPSU, lo cual deja a las universidades con una cuota de asignación reducida que no supera 30%.

Esta pérdida de autonomía, a juicio de Alonso, limita seriamente la capacidad institucional para seleccionar sus estudiantes en función de criterios académicos propios.

Criticó que decisiones tan trascendentales se tomen sin un debate amplio con las universidades, y cuestionó la efectividad de la política de ingreso vigente. Advirtió que los resultados no son alentadores, pues muchas universidades presentan altas tasas de deserción temprana y bajo rendimiento académico.

“En la Facultad de Ciencias, el año pasado 64% de los estudiantes que ingresaron en el primer semestre no aprobaron todas las asignaturas; es decir, es una discusión mucho más global que tiene que estar articulada entre la educación que antecede a la universitaria y la propia educación universitaria porque esa marca un resultado”, puntualizó.

Alonso subrayó que el problema debe ser abordado desde una perspectiva integral, reconociendo las deficiencias de la educación media y su impacto directo en el desempeño universitario.

“Ellos anunciaron unos criterios que tienen que ver con los liceos públicos: los que tengan 20 de promedio, los que tengan 19, se les da asignación directa. Pero evalúa cuál es la realidad de nuestros liceos públicos, en donde hay materias que incluso no se dan en todo el año y se promedia”, dijo. «Así difícilmente se podrá garantizar el éxito estudiantil».

Alertó sobre el deterioro de las condiciones institucionales, pues más de 44% del profesorado ha migrado y la matrícula estudiantil se ha reducido a menos de la mitad en los últimos 25 años.

“Estamos frente a una crisis de fondo que requiere soluciones estructurales, no decisiones improvisadas” afirmó Alonso.

EL NACIONAL