A 30 años de su fundación FEGALAGO agradeció a sus agremiados del Zulia y a las bases de FEDENAGA nacionales que son la fortaleza de las instituciones ganaderas del país.
En entrevista con Richard Fortunato para el programa Informe Fedecámaras, el presidente de Fegalago (Federación de Ganaderos de la Cuenca del Lago de Maracaibo), Gerardo Ávila, señaló que «la actividad que representa el arraigo y modo de vida, de más de cuatro generaciones, desde las unidades de producción, se hace cada día más cuesta arriba»
«A pesar de las coyunturas estamos convencidos que tenemos que seguir resistiendo»
Dijo que «la comida de venezuela está en nuestros campos y es posible a través de los productores y agricultores, asumiendo los retos y las barreras que nos depara la situación actual»
«Es difícil trabajar, muchas veces con las uñas en un entorno económico que es muy adverso para producir un litro de leche o un kilo de carne»
«Es muy difícil trasladarnos a las fincas donde se produce, desde esa Venezuela rural para traerla a las ciudades, allí estamos, vamos a persistir y a resistir», dijo Ávila.
Combustible y energía eléctrica un reto
«El verdadero problema con el tema de la electricidad y el combustible, se centra en las largas horas que nuestros productores deben permanecer en las colas para surtir combustible, el tiempo que se debe invertir para el transporte de la leche y ganado se pierde».
Igualmente las fallas eléctricas en la entidad afectan la vida del campo porque es necesaria para poder echar a andar los potreros, las plantas eléctricas y ofrecer una refrigeración debida del producto. Este factor ocasiona pérdidas, manifestó Gerardo Ávila ante la interrogante sobre el servicio eléctrico que impacta a la región.
El servicio eléctrico no es regalado
A juicio de Ávila, las fallas eléctricas han tendido a mejorar, pero persisten las fluctuaciones de voltaje, que afectan los termos contenedores de leche, no hay activo que aguante esa fluctuación de voltaje. Porque tienes que sustituir el cableado, sustituir equipos que se transforman en un gasto mayor que el que se paga por electricidad.