Joan Castellanos y Giorgio Cunto, analistas de Ecoanalítica, analizaron las cifras de hiperinflación publicadas recientemente por el Banco Central de Venezuela y cómo éstas se contrastan con el escenario hiperinflacionario del país al que ha hecho seguimiento la firma consultora.
De acuerdo con Castellanos, Venezuela tiene el registro más largo en el mundo de 36 meses de hiperinflación, ranking basado en una definición arbitraria de autores.
Cunto destacó que no solamente es una aceleración y variación de precios que está muy por encima de lo que registran otros países, sino que también indica pérdida de confianza de los ciudadanos en la moneda oficial.
«En las cifras publicadas por el BCV se muestra una diferencia en el mercado entre cada uno de los meses, sin embargo, la relación interanual converge»
En este sentido, Castellanos indicó que una de las relaciones que tiene la hiperinflación del país con el tipo de cambio es la variación de precios, lo que se podría traducir como «la inflación en dólares».
«Si comparamos los precios de la canasta básica alimenticia a principio de año con el precio de la misma a finales del año, esta tendría un monto muy diferente, por ejemplo»
De acuerdo con el analista, lo mismo pasa con los salarios en Venezuela y también con los diferentes tipos de desembolsos como bonos, que aunque se estén aumentando con regularidad, estos pierden valor con el paso de los días.