Azú Pastelería, un emprendimiento basado en crear a través de la técnica contemporánea, postres con frutas amazónicas e ingredientes típicos para conquistar los paladares exigentes de la ciudad.
En el programa «Entre Sabores», conducido por Ligia Velásquez, estuvieron conversando María Evans, Jesús Torrealba y Vanessa Bosca, quienes son dueños de la marca y relataron los orígenes para su formación. Evans destacó que siempre tuvo cierta afición a los postres y desde pequeña ayudaba a su tía a elaborarlos, estudió Ingeniería Informática, pero la vocación tocó su puerta y decidió aprender sobre pastelería en Le Cordon Bleu de Madrid.
En noviembre de 2017 estrenó Azú Pastelería, con el objetivo de ofrecer postres con técnica francesa e ingredientes locales para eventos, desde reuniones pequeñas hasta bodas, y la receptividad superó sus expectativas iniciales. Luego se añadieron al proyecto Jesús Torrealba, quien había trabajado en varios restaurantes y Vanessa Bosca, internacionalista con experiencia en chocolate luego de su experiencia en Cacao de Origen.
En tal sentido, se aprovechan los ingredientes del Amazonas que trae a Caracas Sabores Aborígenes: la aromática sarrapia, el copoazú y la tableta de chocoazú son parte de su tartaleta Azú, proponen unos Petit four con túpiro, ensayan con la manaca e incluso coronan postres con hormigas limoneras. Asimismo, poseen una línea tradicional en la que invitan con ingredientes cercanos, como la crujiente de parchita o su versión del bienmesabe.
«Armamos la infraestructura para un servicio de catering porque a nivel de costo no teníamos los recursos para hacer una pastelería de calle, e incorporamos técnica contemporánea basado en el aprendizaje en Europa, realizando una fusión con nuestros sabores amazónicos y de muchos tradicionales. Nos dieron una oportunidad en una casa de novias reconocida y se nos abrió un mundo de posibilidades. Es una felicidad que nuestros productos tan valorados afuera nos estemos utilizando acá», especificó Evans.
Destacaron que en un taller de San Bernardino, en Caracas, elaboran los postres y adicionalmente dictan cursos para aprender a lograr recetas.