De acuerdo con Javier Ramírez Lares, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Mérida (Cacoime), el problema en el estado con el suministro de la gasolina es sumamente grave; «está afectando toda la dinámica productiva de la ciudad, y hasta lo personal y familiar; la ciudad se ve como un enorme estacionamiento de colas de carros esperando por el combustible».
Agregó que, la gasolina sólo llega cada dos o tres días en pocas cantidades, lo que obliga a los conductores a permanecer en las colas.
“Esta situación nos está llevando a la paralización total de la ciudad”, afirmó.
El presidente de Cacoime detalló que, este escenario también repercute en los agricultores -que no pueden mover sus cosechas ni sus tractores- y al turismo, «porque nadie va a venir a una ciudad a pasar el rato haciendo cola», señaló Ramírez
Para el vocero empresarial andino lo más preocupante es que ninguna autoridad regional ha tomado medidas para aliviar el problema.
«Hemos tratado de establecer contacto con la Gobernación, pero no vemos solución. Hemos tenido mejores momentos, pero este mes ha sido de terror», comentó.
Ramírez también refirió que, Corpoelec aplica cortes sin planificación; situación que impide organizar las actividades productivas.
«Uno a veces llega al comercio o al hogar y allí mismo se fue la luz. No se puede trabajar ni atender a la familia», comentó.
Agregó que, muchas veces los comerciantes optan por bajar los breakers para evitar daños de equipos.
«La calidad de vida del merideño se vino abajo», concluyó.
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