César Marín, presidente de la Cámara de Industria, producción y comercio de la Gran Sabana, estado Bolívar, precisó que de la capacidad instalada la zona se mantiene en un 60%, pues indicó que gran parte de los comercios que han mermado porque muchos han tenido que cerrar sus puertas, o migrar a otros rubros.
Con la situación de declive que vive la región refirió que “por ejemplo de zapaterías queda solo una, y los demás comercios para no cerrar cambian de rubros”, no obstante precisó que aún no se maneja una cifra.
Marín, indica que a lo señalado se agrega que la moneda nacional prácticamente desapareció, ya que se utilizan divisas o reales, que es la moneda del país que colinda con la entidad, por lo que además dada la naturaleza de la frontera se puede pagar en oro también.
De esta forma, informó que los rubros del comercio son de origen brasilero que detalla son mucho más económicos, “de forma que estamos obligados por nuestra economía a comprar esos productos brasileros, como si estuviésemos en Brasil”.
Es así que resaltó igualmente, que la actividad económica es prácticamente compra venta, y a propósito de ello, recalcó que no se ha implementado las máquinas fiscales impuestas en varios sectores, ya que prácticamente «fluimos con una economía informal”.
En cuanto a la seguridad en la entidad, precisó que se vive un momento en el que los negocios que coexisten se tienen que cerrar antes de las 6:00pm por la inseguridad que se ha desatado.
Finalmente, enfatizó que está haciendo un análisis para ver cómo asumir el reto para los próximos meses, debido a que “prácticamente los comerciantes están trancados porque no se mantiene el flujo”, dijo, al tiempo que subrayó que ha mantenido reuniones con varios sectores del gobierno, y “puedo decir que la alcaldía está cogiendo rumbo para trabajar en la economía. Ésta es una zona de puerto libre, y en esas gestiones andamos para ver cómo se puede engranar el sistema”.
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