Robert Kemp, ex consejero comercial de la Embajada de Estados Unidos en Venezuela, asegura que se retomará el intercambio comercial una vez que el país recupere la democracia.
El intercambio comercial entre Estados Unidos y Venezuela es prácticamente inexistente. La factura petrolera ha llegado a cero, como consecuencia primordialmente de las sanciones que entraron en vigor en enero de 2019. Pero esa considerable disminución también se debe a las políticas económicas del régimen de Nicolás Maduro, a juicio de Robert Kemp, ex consejero comercial de Washington en Caracas.
Kemp se encuentra en Washington prácticamente en el mismo trabajo que desempeñaba en la Embajada de Estados Unidos, seguir de cerca el comportamiento de la economía venezolana y asesorar a las empresas norteamericanas que aún operan en el país.
“Antes de las sanciones que se activaron el 28 de enero, recibíamos 500.000 barriles diarios de petróleo. Ahora no recibimos nada. No hay mucho comercio. Es una lástima, pero es parte de las políticas de Maduro y sus cómplices, que destruyeron la economía venezolana mucho antes de las sanciones”, afirmó.
Las relaciones comerciales entre Estados Unidos y Venezuela han estado signadas por las exportaciones petroleras hacia el norte. Esto quiere decir que la balanza siempre se inclinaba a favor del país, pues la compra de crudo venezolano representaba 95% del intercambio entre las dos naciones, al menos hasta 2017, de acuerdo con cifras publicadas por la Cámara Venezolano Americana, Venancham.
Sin embargo, los números recogen que entre 2017 y 2018 se incrementó 10% el intercambio comercial, pero básicamente por las importaciones de derivados petroleros que hacía Petróleos de Venezuela desde Estados Unidos.
Hay muy pocos rubros aparte del petróleo en el intercambio entre los dos países. A juicio de Kemp, seguirá de esa manera hasta que el régimen de Maduro salga.
“Estados Unidos está usando las sanciones y la diplomacia para hacer presión con el fin de lograr una transición democrática en Venezuela. Reiteramos nuestro apoyo a Juan Guaidó como presidente interino y estamos seguros de que nuestros lazos comerciales serán retomados una vez que el país logre la democracia”, recalcó.
Estados Unidos dirigie los recursos a ayudar a los países vecinos de Venezuela que reciben la oleada de inmigrantes que huyen del régimen de Maduro. Kemp detalló que en total han enviado 256 millones de dólares, de los cuales 213 millones son de ayuda humanitaria, pero también se entrega ayuda económica a muchos venezolanos que lo requieren para sobrevivir.
“Las sanciones sí están teniendo efecto como lo esperábamos, solo hace falta ver la producción petrolera. Sabemos que eso no solo se debe a las medidas del gobierno de Estados Unidos, sino también a los propios problemas de Pdvsa, del sistema eléctrico y de la corrupción del régimen. Pero nuestra presión la ejercemos contra los responsables de este desastre, no contra el pueblo venezolano. Lo que queremos es que recuperen su democracia”, dijo.
Con información de El Nacional