Alejandro Álvarez, biólogo y ambientalista y coordinador general de Clima21, manifestó que el daño ambiental de Venezuela tambien causa deterioros en la economía. Con la explotación minera ilegal en el “Arco minero” y con los recientes derrames petroleros en la costa occidental del país, sus ecosistemas megadiversos sufren daños importantes.
Venezuela es un país de ecosistemas megadiversos, con una gran cantidad de organismos, flora y fauna en sus espacios naturales. Esto no es característico de todos los países, por lo que nos convierte en una región muy importante ambientalmente hablando, así lo manifestó el biólogo en una entrevista para el programa “Espacio abierto” de Fedecámaras radio.
La minería ilegal está afectando los ecosistemas del Parque Nacional Canaima, causando a su vez daño ambiental en el río Caura. Este río alimenta la central hidroeléctrica «Simón Bolívar», ubicada en la Represa del Guri. “Hay que tener en cuenta que esta central hidroeléctrica produce más del 70% de la energía eléctrica de Venezuela”, expresó Álvarez.
Estos daños ambientales no solo pueden tener efecto en nuestra flora y fauna, sino también sobre la economía del país, si no se pone un freno a la destrucción medioambiental, aseveró.
Con respecto al derrame petrolero más reciente que afecta los estados de Falcón y Carabobo, en el llamado “Golfo triste” no solo se afecta la diversidad biológica. La actividad pesquera y el sector turismo se están viendo afectados desde hace aproximadamente dos meses. “No tenemos noticias sobre la limpieza de estas zonas. No hay información y no parece haber avances de ningún tipo”, expresó el coordinador general de Clima21.
Por último, enfatizó que una gestión medioambiental correcta nos puede devolver grandes ecosistemas del país, además de ayudarnos a recuperar parte de nuestra economía.
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