El presidente de de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (FEDEAGRO), Aquiles Hopskin, aseguró que fijar un precio para el maíz a 16 bolívares soberanos y para el arroz en 20, trae como consecuencia la quiebra del productor nacional. Asimismo, expresó su preocupación y pronosticó consecuencias nefastas para el sector, si no se modifica la política económica implementada con los rubros.
Expresó también que para el método de recolección, un productor comienza a preparar la tierra al menos 30 días antes de cosechar, y en el proceso anteriormente mencionado dura 120 días, por ende, el precio para el momento de la recolecta, es insuficiente para seguir produciendo. «¿Por qué tratar así al productor agropecuario? ¿por qué las cosas impuestas? Hemos conocido que en plena cosecha, entraron 7 barcos con maíz, 5 barcos con caña de azúcar y 4 barcos con arroz. Entonces, hay dinero para importar pero no para la producción nacional», afirmó.
En otro sentido, reiteró al gobierno que «si quieren controlar los precios, controlen la hiperinflación». De igual manera, destacó que desde hace aproximadamente 4 meses, no hay ningún tipo de comunicación con el Ministerio de Agricultura. «Los supuestos precios acordados, fueron precios impuestos».
Reafirmó que las expectativas de cara al 2019, son preocupantes, ya que se pronostica la quiebra masiva de los productores agropecuarios si no se enmiendan las políticas económicas por parte del Estado.
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