Google ha solicitado registrar la patente de una zapatilla para moverse en la realidad virtual. A las zapatillas está fijado un panel especial con ruedas, que funciona como una cinta de correr y, cuando el usuario se mueve en el mundo real, lo regresa a su sitio, permitiéndole navegar por el entorno virtual mientras permanece en su lugar.
A pesar del desarrollo de la tecnología de realidad virtual, su uso está fuertemente limitado por los parámetros del entorno externo. El usuario puede descargar un juego con un mapa amplio, pero no puede moverse sin chocar contra paredes u obstáculos en un ambiente real.
Para ello los ingenieros desarrollan sistemas especiales que permiten al usuario moverse sin salir de su lugar pero creando la ilusión de movimiento real en un entorno virtual: la mayoría de ellos se asemejan a cintas de correr, que son omnidireccionales, es decir, le permiten moverse en cualquier dirección.
Según una patente publicada la semana pasada, Google ha concebido el concepto de una cinta de correr en una forma más compacta, que cabe en unas zapatillas. Se entiende que tan pronto como el usuario dé un paso, las ruedas de los zapatos lo volverán a poner en su lugar y los sensores del dispositivo transmitirán el movimiento del usuario a la realidad virtual, moviéndolo en el entorno. Según los autores de la patente, esto crea la posibilidad de un movimiento infinito en un espacio limitado.