El periodista especializado en criminalística, Javier Ignacio Mayorca, habló en la edición de “Crímenes Sin Castigo” de hoy sobre: “Riesgos que se corren al tener grandes cantidades de dinero en efectivo “
El nuevo cono monetario llegó. Pero el antiguo todavía no ha terminado. Esta fase de adaptación en la que aún tienen plena validez los viejos billetes comporta varios riesgos para la ciudadanía
Algunas de las situaciones mas frecuentes al cargar con grandes cantidades de dinero en efectivo:
- En primer lugar, los comercios pequeños y medianos están acumulando enormes cantidades de billetes en sus operaciones diarias y cotidianas. Esto es consecuencia directa de la inflación que vive el país, y también de la imposibilidad de llevar a cabo todas las operaciones comerciales con tarjetas de débito o lo que conocemos como dinero plástico. Esta acumulación indebida de papel moneda constituye un atractivo para los delincuentes.
- Hay además en el país una delincuencia rapaz, que se contenta con poco o nada y que está dispuesta a ejercer violencia contra las posibles víctimas. Se trata de delincuentes inexpertos, que por ejemplo están a la caza de los adultos mayores que recién han cobrado sus pensiones. En estos casos, una sola víctima no los satisface, y por ende se incrementa el riesgo de situaciones de victimización colectiva.
- Una tercera situación al tener grandes cantidades de dinero en efectivo, tiene que ver con las personas que incurren en excesivas situaciones de exposición con la finalidad de acumular efectivo para el pago de sus operaciones diarias. Son por ejemplo los encargados de construcciones que durante los días viernes deben pagar sus respectivas nóminas en efectivo, pues sus empleados generalmente no están insertos en el sistema bancario. Anteriormente, el dinero de las nóminas podía ser ocultado con facilidad en algún bolso o en maletines. Esto hoy resulta imposible, y se hace fácilmente detectable por los antisociales.
En estos casos, se recomienda siempre la opción de reemplazar el papel moneda por dinero plástico. Pero sabemos que esto también tiene una limitación, pues los bancos no disponen de material suficiente para otorgar a tarjetas de débito a toda su clientela.
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