La ingeniería neuromórfica es la tecnología existente que más se acerca a imitar el funcionamiento de un cerebro humano.
La tecnología ha buscado imitar las funciones cerebrales durante años. A nivel científico se dice que quien logre entender, descifrar e imitar como actúa el cerebro, y sea capaz de replicarlo artificialmente abrirá las puertas a una gran revolución científica y tecnológica.
La ingeniería neuromórfica se basa en imitar las estructuras neurobiológicas ubicadas en el sistema nervioso utilizando un sistema de integración a gran escala con circuitos analógicos. Está considerada como una materia interdisciplinaria porque utiliza elementos de la física, la microelectrónica, la biología, la informática y la matemática.
Esta tecnología se empezó a desarrollar en la década de los 80, en Estados Unidos, buscando imitar el sistema nervioso de los animales. Sin embargo, con el paso de los años y de diferentes técnicos se dieron cuenta que estas maquinas tenían mucho en común con el cerebro humano.
Ya las grandes empresas de tecnología están utilizando la ingeniería neuromórfica
Las neuronas son capaces de transmitir grandes cantidades de información a gran velocidad. Basados en ese principio, Intel creo un chip neuromórfico capaz de aprender información gracias a sus 100 millones de neuronas artificiales.
La ingeniería neuromórfica sigue en constante evolución. El continuo desarrollo de esta tecnología busca lograr que se vuelva más eficiente enérgicamente y conseguir soluciones a problemas más complejos de forma más rápida.
Con información de Teledoce.com
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