Luigi Pisella, presidente de Confederación Venezolana de Industria (Conindustria), consideró que la nueva prórroga sobre la exoneración de impuestos de los productos terminados atenta contra la producción nacional, la generación de empleos y merma el poder adquisitivo de los trabajadores
“Es obvio que existe una marcada protección a las importaciones, a los trabajadores de esos países y a sus empresas”, afirmó.
El presidente de Conindustria resaltó que en Venezuela se exonera aranceles, de Impuesto Sobre la Renta (IVA) y otro tributos a los productos terminados que vienen del extranjero, a contrario de la materia prima que se usa en el país para la producción nacional, donde se cobran todos esos impuestos y aranceles tributarios.
“De esta manera se hace más rentable importar que producir en el país”, señaló.
Pisella destacó que existió una inflación en el año 2021 del 682%, lo que provocó que los productos nacionales fueran aumentados de acuerdo a ese porcentaje inflacionario, mientras que la devaluación apenas llegó a un porcentaje de 315%, que permite que los productos de afuera valgan la mitad en costo.
“Estas dos medidas no incentivan la producción nacional y es por ellos que los productos importados cuestan muchos menos que los productos nacionales”, mencionó.
El gremialista detalló que desde Conindustria y de todos los sectores industriales marcaron una ligera recuperación en el año 2021, donde se logró pasar de un 21% de capacidad instalada a un 23%, lo que repercuto de manera favorable a todos los trabajadores del sector, con un aumento salarial de más del 50%.
“Logramos alcanzar, de manera promedio, que estos (trabajadores) tuviesen 125$ al mes, es decir, un incremento del 60% de sus salarios”, añadió.
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