Científicos de Harvard y la compañía tecnológica Life Biosciences están desarrollando una nueva terapia genética que puede revertir la pérdida de visión, terapia que podría funcionar al añadir “copias nuevas de un gen que está dañado”, o al reemplazar un gen defectuoso o ausente en las células de un paciente con una visión sana” de ese gen.
Los resultados preclínicos de un nuevo estudio con esta técnica arrojan esperanza para revertir la pérdida de visión en primates, producida por un trastorno ocular, llamado neuropatía óptica isquémica, el equivalente a un derrame cerebral pero en el ojo, y que se caracteriza por la pérdida visual y pérdida del campo visual sin ningún otro síntoma.
De los 10 primates del estudio, seis fueron tratados con la nueva terapia genética, mientras que cuatro recibieron una solución de control en los ojos.
Los ojos de los primates que recibieron el tratamiento durante cinco semanas acabaron respondiendo mucho mejor a la estimulación luminosa, a la vez que la salud de las fibras nerviosas oculares mejoró de forma significativa.
«El potencial de la terapia abre nuevas oportunidades para el rejuvenecimiento celular», explicó el doctor Bruce Ksander, director del estudio.
Estos resultados brindan «esperanza» para «abordar las enfermedades relacionadas con el envejecimiento y restablecer la salud humana», expresó Sharon Rosenzweig-Lipson, directora científica de Life Biosciences.