El economista y especialista en criptomonedas, Aarón Olmos, catalogó de «inviable» la propuesta del mandatario Nicolás Maduro sobre los créditos en Petro, ya que desde marzo del año 2018, el criptoactivo está sancionado por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos.
El especialista indicó que si el objetivo es apoyar al sector empresarial venezolano se debe activar el sistema financiero nacional a través de la modificación del encaje legal a 65% para que los bancos puedan otorgar créditos.
“Si se quiere facilitar el acceso a financiamiento en divisas, se deben activar al Banco Central de Venezuela y a la banca nacional pública y privada a través de los mecanismos que ya conocemos, como los convenios cambiarios, y asignar una cantidad de dólares específica a los empresarios para poder hacer la compra de materia prima y bienes de capital en el mercado extranjero”
Recordemos que el uso del Petro fuera del territorio venezolano está prohibido y solo puede circular en el mercado interno, a través de las casas de intercambio autorizadas por la Superintendencia Nacional de Criptoactivos y Actividades Conexas (Sunacrip).
La situación complicaría innecesariamente las relaciones con proveedores internacionales y obligaría a las empresas a realizar operaciones cambiarias con más frecuencia. Para Olmos, la idea afecta la operatividad de las empresas sin resolver eficazmente el problema de acceso al crédito.
“No necesariamente las personas en el mercado interno están aceptando o usando Petros de forma cotidiana como una herramienta o un método de pago tradicional, lo que quiere decir que la figura de los créditos en divisas denominados en Petro en el mercado interno y externo van a hacer más compleja para el empresario la posibilidad tener acceso a ese dinero, porque se hace más cuesta arriba poder cambiar unos Petros y transformarlos luego a divisas en el mercado interno”
El economista Aarón Olmos para Banca y Negocios también destacó que si se quiere insertar el Petro a la economía venezolana se debe generar confianza, credibilidad y todos los circuitos que sean necesarios para poder realizar operaciones con esta criptomoneda, como puntos de venta, biopago, comercios que los reciban, tomando en cuenta que el Gobierno Nacional ha intentado por casi cuatro años promover este token y no ha funcionado hasta ahora.
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