En primer lugar el 20% de las víctimas tenía edades comprendidas entre los 20 y 24 años. Esto confirma los patrones que han sido reportados en estudios sobre años anteriores. De hecho, si ampliamos el rango de edades, encontraremos que el 47% de las víctimas tenía entre 15 y 29 años. La violencia homicida, por lo tanto, sigue afectando a los segmentos de la población que están entrando a la actividad económica.
De manera que, el impacto de esta violencia en términos de costo resulta enorme para el país. son años de vida productiva que se pierden en virtud de la criminalidad violenta.
Por cierto, durante revisiones hechas en años anteriores, se ha determinado que la gran mayoría de muertos por“resistencia a la autoridad”, es decir, enfrentamientos con policías o militares, tienen también estas mismas edades. Lo cual hace que el impacto económico de la violencia sea todavía mayor.
Ahora bien, ¿Qué hay con respecto a las horas y los días más violentos? en asuntos de homicidios, los días con mayor frecuencia de casos fueron los domingos, los lunes y los sábados, en ese orden. Si tomamos en cuenta solamente los dos últimos días de la semana, abarcaremos el 37% de los casos. Es de presumirse además que la alta violencia durante los lunes se produce como una especie de efecto resaca o residual de los fines de semana. Esta presunción se confirma además si tomamos en cuenta las horas de los homicidios. resulta ser que las madrugadas, es decir, el lapso que comienza en la medianoche y finaliza a las seis de la mañana, acumularon el 32% de los casos, y otro 27% ocurrió entre las 6 am y los mediodías.
Aunque este dato requiere de mayor investigación, se puede indicar que una buena parte de los homicidios durante 2018 estuvo asociada posiblemente a problemas de convivencia, o en todo caso fue perpetrado por sujetos que operan en las proximidades de los lugares de residencia de las víctimas.