
Rusia atacó anoche con unos 650 drones y más de 50 misiles una decena de regiones ucranianas, en un nuevo bombardeo masivo que mató al menos a dos personas y tuvo entre sus principales objetivos el sistema energético ucraniano, según informó en su cuenta de X el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
Las regiones atacadas son Vínitsia y Cherkasi (centro-oeste), Poltava y Dnipró (centro-este), Ivano-Frankivsk y Leópolis (oeste), Sumi (noreste), Kiev (norte) y Mikoláyiv (sur), según Zelenski.
Las autoridades regionales y locales han informado de cortes de luz, electricidad y calefacción en algunas zonas de estas regiones.
La empresa privada ucraniana DTEK ha informado de daños sustanciales en algunas de sus centrales térmicas. La empresa opera actualmente cinco centrales térmicas en Ucrania.
Zelenski calificó el ataque ruso de terrorismo y pidió una vez más a la comunidad internacional y en especial a EE.UU., Europa y el resto de integrantes del G7 que respondan con «sanciones y presión real» hacia Rusia.
javascript:false
La primera ministra ucraniana, Yulia Sviridenko, pidió además a los socios de Kiev que doten a Ucrania de más sistemas de defensa aérea para que el país pueda proteger sus infraestructuras de los misiles y drones rusos.
EFE















