Reinaldo Quintero, presidente del Cámara Petrolera de Venezuela (CPV), explicó que las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos a Venezuela ha condicionado y afectado al sector petrolero privado en cuanto a acceso a bienes físicos como repuestos que necesitan las fábricas. Asimismo, ha influido en la vía financiera en cuanto a cobro y pago, sin acceso a mercados que le permita vender el producto y falta de recursos humanos para la operatividad de las organizaciones.
“Te recortan los recursos para contratar personal y así ser competitivos, inclusive repatriar a personas que se han ido por la diáspora y situación económica que ha generado dos factores, la sanción y la auto sanción”, indicó.
En una entrevista realizada en el programa Petroguía, el presidente de la Cámara señaló que toda la cadena completa del sector petrolero, proveedores, empresas de ingeniería, empresas de servicios técnicos, servicios a pozos y taladros, aguas arribas, corriente negras, la refinación, mercadores internos y externos, se ha visto afectado por las sanciones impuestas.
“Sobre todo los mercados externos, porque tú tienes un producto que quieres vender, nosotros tenemos que recurrir a largas distancias, mercados que aceptan productos aún bajo sanciones y que tenemos que trabajar con altísimos descuentos”, resaltó.
Quintero apuntó que tanto empresas nacionales como empresas europeas se han visto limitadas, debido a que a se apegan a las sanciones, así no se ven afectadas por las aplicaciones primarias, sino por sanciones secundarias, por un efecto colateral, por lo que no pueden operar en Venezuela y se transforma en una merma.
“Esa es merma es por los menos un millón de barriles que estamos dejando de producir por las sanciones directamente”, remarcó.
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