Carlos Trapani, coordinador de Cecocap, indicó que actualmente no se sabe la cifra exacta de los niños y adolescentes que se encuentran laborando en el país, ya que el Gobierno Nacional no publica las cifras reales desde hace mucho tiempo.
Mencionó que en Venezuela se han incrementado los factores de riesgo para que los niños y adolescentes estén en la calle trabajando, puesto que en el país se manifestaba una crisis económica y se sumó la pandemia, por lo que las escuelas se encuentran cerradas y se cuenta con un sistema en línea deficiente, lo que conlleva a que la economía de las familias se complique y los adolescentes busquen aportar dinero para el hogar.
«Cuando ves el conjunto, hay muchísimos factores de riesgo en donde el presupuesto familiar, la economía familiar está muy golpeada, donde muchos niños y adolescentes recurren a trabajar como un medio de sustento»
Señaló que la pandemia ha generado un incremento en la tensión familiar, las familias se encuentran desasistidas y aunado a esto, no hay servicios a los que se pueda remitir a las familias para atender estos temas «Los niños son víctima de esas situaciones de omisión, de falta de programa, de faltas de servicio, y al final, los niños son los grandes invisibilizados en la pandemia».
Trapani explicó que han identificado una brecha entre los niños que tienen posibilidades de conectividad y los que no, esto se ve de manera común en zonas intermedias y zonas rurales.
«Tenemos una generación de primera y una generación de segunda en términos educativos; hay una generación que se puede conectar, que tiene acceso a plataformas digitales, que tiene acceso a Internet, con las dificultades propias de Venezuela, (…) y hay otros bueno que la escuela lo hace a través de mensajes de texto o en el mejor escenario cuando van a la escuela en una cartelera van a copiar a ver qué cosas hay que hacer»
Precisó que el Estado debe reconocer que hay problemas, en este sentido, tiene que dar los datos oficiales, números de denuncias y de solicitudes para permitir tener un balance de las distintas problemáticas que está afectando a los niños en este caso.
Como segundo paso resaltó que se debería realizar un fortalecimiento institucional, es decir, disponer de políticas públicas con el foco priorizado en violencia, en salud mental, en educación y en nivel de vida adecuado, que comprenda alimentación y un buen acceso a servicios públicos, donde las personas tengan condiciones dignas para poder vivir.
En entrevista para Análisis de Entorno conducido por Betania Pérez Álvarez y Juan Carlos Salas mencionó que las consecuencias no necesariamente se van a ver a largo plazo, sino que se pueden ver de forma inmediata, añadió que a raíz de esto se tendría una generación sin posibilidades, sin proyectos de vida, una generación que no cuenta con técnicas para insertarse en el mercado laboral, una sociedad herida por la violencia, por la desatención y por la separación de las familias.
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