Un nuevo análisis de datos antiguos suministrados por la nave espacial Voyager de la NASA reveló que cuatro de las lunas más grandes de Urano; conocidas como: Ariel, Umbriel, Titania y Oberon, pueden tener vastos y profundos océanos escondidos bajo sus cortezas heladas.
Este descubrimiento aumenta la posibilidad de que exista vida en otras partes del sistema solar, debido a que, si los océanos están en estado líquido pueden ofrecer un ambiente adecuado para el desarrollo de la vida.
Además, los datos demuestran que existe una posible fuente de calor en los mantos rocosos de estos nuevos mundos, los cuales podrían proporcionar la energía necesaria para mantener ambientes cálidos en los océanos y favorecer la vida subacuática.
Los científicos afirmaron que necesitan realizar nuevas investigaciones para comprender completamente estos océanos y su potencial para albergar vida.
Por ello, la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos está impulsando una misión para explorar estos misteriosos sistemas en Urano.