El año que está en curso probablemente finalizará con un récord en materia de estafas, muy a pesar de la crisis económica que atraviesa el país
Hasta el mes de septiembre, las autoridades habían recibido y procesado 7.005 denuncias sobre timos de toda naturaleza, así como de sus delitos conexos, como pueden ser la suplantación de identidad, forjamientos de documentos, etc.
Estos son llevados a cabo con la finalidad de “perfeccionar” el engaño y obtener una ganancia económica.
Según cifras conocidas extraoficialmente, en los primeros nueve meses de 2019 fueron iniciadas 5.700 averiguaciones de estafas. El incremento entonces, ha sido de 23% este año.
Todo esto en un contexto de reducción general de las cifras de delitos, como consecuencia directa de la inmovilización social por la cuarentena y el éxodo a otros países, que ya supera los cinco millones de personas.
La gran mayoría de los casos tiene como factor común que las víctimas son captadas a través de las redes sociales, mientras pasan largas horas expuestas a todo tipo de contenidos por internet.
Frente a esta situación, es vital que la ciudadanía se mantenga informada sobre las últimas tendencias y usos de los estafadores. Algunas son verdaderamente novedosas, mientras que otras son simples evoluciones de métodos aplicados con anterioridad.