A un año del apagón nacional registrado el 07 de marzo de 2019, La Cámara de Comercio de Maracaibo ofreció una rueda de prensa. Su presidente, Ezio Angelini informó el estado de la situación económica de la ciudad.
Aseguró que al menos 20% de los comercios que bajaron las santamarías no volverán a abrir. Lo que demuestra que la economía de la ciudad no se ha terminado de recuperar, todavía son notables las consecuencias.
Durante el apagón muchos locales sufrieron daños, los gremios solo contabilizan 550, aunque Angelini afirma que el número real es mucho mayor. Destacó casos específicos como Makro, el Hotel Las Brisas y PepsiCo, las cuales presentaron pérdidas incalculables.
Los empresarios se adaptan para cubrir las necesidades del mercado
Angelini destacó que los empresarios se «reinventaron» e impulsan la economía local, cubriendo los nichos que quedaron desatendidos por las grandes cadenas.
«Estamos menos mal» comenta, al mismo tiempo que recuerda el 2019 como el peor año en la historia de la economía republicana de Venezuela.
El país está pasando por una crisis sistemática, lo que llevó al empresario a auto gestionarse los servicios, realizando el papel que debería hacer el estado. Si bien el consumo eléctrico a nivel nacional ha bajado un 30%, el problema no ha sido resuelto.
La privatización de los comercios y la autogestión de los servicios han hecho que se pierda la confianza en el entorno personal y jurídico. Un empresario sin confianza no invierte y lo que requiere la situación económica de Maracaibo y del país es inversión.
Disminuir los impuestos municipales puede ser un incentivo fiscal
La Cámara de Comercio de Maracaibo ha estado trabajando de la mano con la alcaldía para disminuir el pago de impuestos de personas jurídicas, y fijar una tasa por aforo y número de metros cuadrados del local.
Se quiere brindar el apoyo a la alcaldía con el cobro de los impuestos, y al mismo tiempo tener un precio justo por los servicios, la idea no es que regalen los servicios.
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