Carlos Albornoz, presidente de Instituto Venezolano de Leche y Carne, aseguró que la única forma que la proteína animal crezca es elevando producción de carne bovina, ya que es el segundo tipo más consumido, además de impulsar la producción de carne y pollo, por ser la primera proteína que se consume en Venezuela y que ha tenido una dura caída al pasar de 48 kg en 2012 a 9 kg, “prácticamente el 20% de lo que se llegó a consumir”, resaltó.
De esta forma, remarcó que “para poder nosotros crecer en la industria es vital que se incremente la producción de maíz, sorgo, arroz, y soya porque en esos productos encontraremos la solución para producir alimentos balanceados para animales que puedan alimentar la industria de ensamblaje, es decir la avícola, porcícola, piscícola, así como la producción de leche”, apuntó.
Además es importante recalcar que “el cerdo, pollo, huevos, en su mayoría son industrias de ensamblaje, en la cual los animales son alimentados por materia prima llámese cereal, aminoácidos, y soya y esos productos según Fedeagro solo alcanza un 10% de la siembra el ciclo norte invierno”, lo que en consecuencia subrayó, “el sector secundario que es el que procesa y transforma hace que llegue muy poco a los hogares venezolanos”.
Por lo menos en la industria avícola, resaltó que igual depende de la producción primaria, “si estuviésemos produciendo el 70% de maíz amarillo, arroz, y soya que no ha podido a avanzar del 0,6% pudiéramos prever en cuánto tiempo pudiéramos recuperar el sector”, dijo.
Entre tanto, refirió que en el tema de la leche “nosotros llegamos a consumir 84 litros y estamos en 42, estamos prácticamente a la mitad de lo que se consumía. El caso de la carne roja es mucho más grave, llegamos a conclusiones de que Venezuela consume 2,7 Kg”, detalló.
Es así que denunció que de 1 millón 700 mil nacimientos de bovino en Venezuela lamentablemente se alimenta a la industria de contrabando que sale hacia Colombia, “en los últimos tres años Fedegan citó que su rebaño creció en 4 millones de reses”, por lo que indicó que “ese crecimiento ilógico hace que el rebaño Venezuela pierda alrededor de 1 millón 333 mil reses y sumado a las reses muertas”.
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