El economista y director general de la firma consultora Aristimuño Herrera & Asociados (AH&A), César Aristimuño, estima que las franquicias Master Card y Visa se mantendrán “en principio” operando, sin embargo destaca que el gran problema para el gobierno sería “la banca pública” pese a que tienen el proyecto del ‘suiche’ nacional con el que buscan generar una nueva plataforma de pago.
“Lo que se prevé es que para marzo haya un dictamen con relación a las empresas Visa y Master Card, aunque prácticamente la gran preocupación del gobierno es la sanción que le pueda generar a los bancos Bicentenario y Tesoro”, dijo tras la reunión que sostuvieron el BCV y la Sudeban para concretar la implementación del Proyecto Naiguatá que actualmente presenta un avance del 75%.
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Por el contrario, enfatizó que no tienen estimado que la banca privada quede fuera del circuito de operaciones de transacciones con Visa y Master, es así que el gobierno se está buscando generar una alternativa, pero “por lo que vemos que ha pasado con empresas como Chevron, donde se ha ido extendiendo el plazo de operaciones, estimamos que pueda llegar a pasar lo mismo y las empresas continúen operando”, precisó.
En este sentido, apunta que para el proyecto ‘Naiguatá’ hay una prueba técnica en febrero con la finalidad de ver el proceso de sus avances y lo que se estima es que marzo entre operación, no obstante insistió en que las empresas estadounidenses quieren continuar en el mercado pero que “no depende de ellas, al final depende de los Estados Unidos, pero nuestra estimación es que seguirán operando”.
De este modo, aunque tampoco descartó la posibilidad de la ida de las empresas, avizora que el daño que se haría al sistema financiero sería catastrófico porque “no hay una alternativa que sustituya esto de forma inmediata, la puesta en práctica de un sistema de la franquicia no será fácil”, aseguró.
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