La Organización estableció prioridades para seguir apoyando a pescadores y acuicultores y potenciar su rol y contribución a la seguridad alimentaria, el alivio a la pobreza rural y el manejo responsable y armónico de los recursos naturales.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) clausuró el 31 de marzo de 2023 la campaña mundial del Año Internacional de la Pesca y la Acuicultura Artesanal 2022, que se extendió durante un año, centrada en los pescadores artesanales a pequeña escala, los acuicultores y los trabajadores de la pesca, subrayando la necesidad de mantener el impulso en esta materia.
Con más de 260 eventos celebrados en 68 países, el Año Internacional de la Pesca Artesanal y la Acuicultura 2022 «celebró a los millones de personas que trabajan en la pesca y la acuicultura artesanal a pequeña escala -entre ellas cerca de 45 millones de mujeres pescadoras artesanales- que producen el 40% de todo el pescado que comemos», aseguró el Director General de la FAO, QU Dongyu, en la ceremonia de clausura, añadiendo: «Son guardianes de valiosos ecosistemas, y de tradiciones y culturas de larga data».
En el caso de la Oficina Regional de FAO para América Latina y el Caribe, la organización cerró el AIPAA con un evento en el marco de la XVIII Sesión de la Comisión de Pesca en Pequeña Escala, Artesanal y Acuicultura de América Latina y el Caribe (COPPESAALC).
La COPPESAALC se llevó a cabo del 29 al 31 de marzo en San José, Costa Rica, y sus objetivos fueron reportar las medidas adoptadas respecto de los acuerdos de la reunión anterior, y reflexionar colectivamente sobre los temas que atañen a la sostenibilidad y contribución de la pesca y la acuicultura a la seguridad alimentaria, el alivio a la pobreza rural y el manejo responsable y armónico de los recursos naturales. Esto, en consonancia con las necesidades de los países miembros de la Comisión, las prioridades regionales de la FAO y los objetivos de la Agenda de Desarrollo Sostenible de la ONU.
En este contexto, la FAO lanzó tres publicaciones sobre pesca y acuicultura artesanal, las que se realizaron en base a encuestas y entrevistas a personas vinculadas a la pesca y la acuicultura en diez países en América del Sur.
Los tres informes adoptan el enfoque de género y evidencian, por medio de datos y la revisión de programas a nivel país, la relevante participación de las mujeres en las cadenas de valor de la pesca y la acuicultura artesanales en pequeña escala en América del Sur, así como el importante desafío que plantea el avanzar de manera sostenible y sistémica en la reducción de las brechas de género presentes en el sector.
A nivel regional, entre los logros destacados del año, se creó una red de acuicultores en Mesoamérica, se promovieron campeones de pesca y acuicultura artesanal en el Caribe, y se realizaron eventos de consumo de pescado y asociatividad relacionados a los sectores.
“La celebración del AIPAA fue un reconocimiento importante para mujeres y hombres de la pesca y la acuicultura artesanal en pequeña escala, y para las y los trabajadores del sistema alimentario del sector, que contribuyen significativamente al logro de un mundo sin hambre”. En ese contexto, «las publicaciones que lanzamos hoy nos entregan un panorama más completo, con recomendaciones concretas para fortalecer el sector y para destrabar temas clave”, explicó José Aguilar Manjarrez, Oficial de Pesca y Acuicultura de la FAO.
Pequeña escala, gran valor
La pesca artesanal a pequeña escala y la acuicultura (o piscicultura y marisqueo), realizadas en su mayoría por familias constituyen un subsector enorme. La pesca artesanal proporciona medios de subsistencia a casi 500 millones de personas en todo el mundo, el 95% de ellas en el Sur global.
Sin embargo, entre su mano de obra se encuentran algunas de las comunidades más vulnerables a la degradación medioambiental, la pérdida de biodiversidad, los impactos climáticos y las crisis económicas, ya que contribuyen a la gestión de los recursos acuáticos de los océanos, ríos y lagos del mundo.
Para concienciar sobre su papel, la campaña dirigida por la FAO, con el apoyo de un amplio abanico de socios, ayudó a forjar y fortalecer alianzas entre los trabajadores de la pesca y la acuicultura artesanales a pequeña escala y otras partes interesadas. Ejemplos de ello son la Red Iberoamericana de Pesca Artesanal a Pequeña Escala (RIPAPE) y la Plataforma del Magreb y Norte de África para la Pesca Artesanal.
El Informe Final del AIPAA 2022 destaca el importante número de declaraciones, llamamientos a la acción y manifestaciones realizadas por los socios, a nivel nacional, regional y mundial, además de ofrecer recomendaciones para seguir apoyando al subsector. Estas incluyen las áreas de sostenibilidad medioambiental, social y económica, gobernanza, igualdad y equidad de género, seguridad alimentaria y nutrición, resiliencia y participación de los jóvenes.
Aunque el AIPAA 2022 está llegando a su fin, «no debería ser el final, sino un nuevo comienzo en el que continuemos amplificando las voces de los pescadores artesanales a pequeña escala y sigamos apoyando el desarrollo de planes y estrategias nacionales inclusivas de pesca y acuicultura artesanal a pequeña escala», señaló el Director General de la FAO.
Nota de Prensa