Daniel Varnagy, investigador titular de la Universidad Simón Bolívar (USB), manifestó que en Venezuela se ha registrado una disminución sustancial en la demanda de bienes, productos y servicios, debido al poco acceso que tiene la población a ellos, y al bajar sus precios vuelve progresivamente la capacidad de adquirirlos.
“Al aumentar la demanda comienza a haber “un arranque” en la tasa de recesión de esos bienes, los cuales, generalmente de naturaleza perecedera, suelen ser los primeros que registran estas variaciones porque son los de mayor demanda y los que requieren de esos cambios rápidos de precios para poder ser consumidos”, expresó Varnagy.
En Mesa de Análisis el experto aseguró que con el cambio abrupto de la reconversión monetaria del año pasado, algunas empresas cerraron, otras quebraron, unas decidieron hacer ciertos movimientos financieros para liquidar antes a sus empleados y después recontratarlos.
“Pasó que el Venezolano no había entrado en la curva real de la hiperinflación y está muchas veces se puede simular como un conjunto de rectas, sin embargo, esta curva tiene otras naturalezas económicas como matemáticas en su simulación, pero una vez que ya las organizaciones entendieron que el cambio de reconversión ya no era una medida momentánea sino sistemática, comenzaron a cambiar sus estructuras de costo para poder absorber con mayor rapidez y facilidad los cambios en los salarios mínimos”, comentó.
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