Pedro Castillo, presidente de Perú, ha reconocido la percepción de inseguridad aumenta por las condiciones de vida en los vecindarios y no necesariamente por la presencia de refugiados y migrantes venezolanos.
Hasta hace unas décadas se recuerda que Venezuela se caracterizaba por ser un país receptor de migrantes, en el cual incentivó la inmigración de campesinos y trabajadores que huían empobrecidos después de la Segunda Guerra Mundial.
Sin embargo en un comunicado el presidente Castillo sostuvo que daría un «plazo de 72 horas a extranjeros ilegales para dejar el país, los que han venido a delinquir». Sin embargo, no ha deportado a nadie en sus 10 meses en el poder.
Según la Fiscalía, solo el 0,6% de las denuncias por delitos en 2019 y 2020 en Lima fueron contra venezolanos. Sin embargo, el 28% de los peruanos en la actualidad tiene una percepción negativa, y el aumento de la delincuencia no es algo nuevo en el país.
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