El presidente de Fedecámaras Anzoátegui, Marco Tulio Salazar, expresó que la situación actual de Venezuela es la peor que ha tenido en toda su historia.
Destruida su economía y disminuida en su valor social; destruida la industria petrolera y en su valor más bajo la producción, destruida todos los servicios públicos, desmejoradas la salud y la educación, según indicó el empresario.
Salazar sostuvo que Venezuela está en una hiperinflación eterna bajo una escasez permanente, además del resto de las condiciones deplorables que la afectan.
“Ahora nos presentamos ante una cuarentena que aunque es una medida positiva para controlar el Coronavirus; no están siendo tomadas medidas compensatorias para mitigar el efecto en el sector económico y en la población”.
El gremialista comentó que el salario no le alcanza a las personas y que si estas no pueden salir de sus casas, se van a salvar del Coronavirus, pero se van morir de hambre.
“A las empresas se les está obligando a cumplir con el Impuesto Sobre La Renta (ISR) antes del 31 de marzo, sin ver las calamidades por la que están pasando por dicha la cuarentena”.
Aseguró que en otros países se han tomado muchas medidas compensatorias pero que el Gobierno de Venezuela todavía no reflexiona.
En el estado Anzoátegui, al igual que en el resto del país, existen los mismos problemas, pero en este, mucho más agravados por decisiones regionales, según expresó.
“Es bueno destacar el inmenso ecocidio que se está realizando en la zona de los cayos en Chichiriviche, sin que ninguna autoridad tome cartas en el asunto”.
Sostuvo que los servicios públicos en el estado Anzoátegui están generalmente en pésimas condiciones:
- Sin gasolina, siendo el estado que tiene el 60% de la faja petrolera.
- Sin gas, siendo el estado declarado «Estado gasifero de Venezuela».
- El agua en algunos sectores no llega y en otros muestra irregularidad.
- La electricidad se torna a veces intermitente en algunas poblaciones del estado.
- La vialidad interurbana es un desastre y la vialidad rural dejo de existir.
- En la construcción, donde este estado fue de avanzada producción, ya no hay ni cemento ni acero.
“Tenemos una planta cementera, en Pertigalete, donde antes exportábamos cemento, hoy prácticamente paralizada.”
A nivel turístico, sector en el que aseguró tener las mejores condiciones, dijo que están disminuidas todas las operaciones en su máxima expresión.
Además mencionó que el sector industrial y comercial sólo está trabajando a “media máquina” bajo un 10-15% de su capacidad instalada.
“Al Ejecutivo Nacional, si se le pudiera solicitar algo, sería un cambio de rumbo a 180 grados en sus políticas económicas ya que las ejecutadas hasta ahora, todas han fracasado”.
Salazar mencionó que en este momento solicitaría una flexibilización para todos los compromisos que tienen los empresarios, buscar medidas compensatorias a las dificultades de los mismos y de la población, fuentes de financiamiento, subsidios y trabajo a la sociedad.
“Desde Anzoátegui le pedimos al país que tenga en su accionar prudencia y calma, acatemos la cuarentena, este es un medio eficaz para controlar la pandemia”.
Así lo expresó en una entrevista exclusiva para Fedecámaras radio realizada por Marian Carmona.
“Venezuela saldrá bien de esta coyuntura, veamos y luchemos con optimismo, el futuro es nuestro y con trabajo y tesón saldremos adelante”. - Marco Tulio Salazar.