Rodrigo Rodríguez, socio de Consultoría en PwC Venezuela, manifestó que Venezuela está ávida de financiamiento, el mercado de valores en el país se ha contraído severamente y la realidad de la banca es muy distinta a la que estábamos acostumbrados.
De acuerdo con Rodríguez, la bolsa de Valores está descentralizada al igual que el tipo de cambio, y el mercado de Valores empieza a tomar un auge que es natural en un país con una actividad económica relativamente estable.
Aseguró que el crédito corporativo está indexado al tipo de cambio y que, en ausencia de la Banca, el mercado de Valores ha cobrado fuerza como el sustituto de ella, en préstamos a corto plazo o como fuente de financiamiento para las empresas.
“La banca ha venido manejando un sistema de encaje legal que ha sido parte de una política monetaria severamente contractiva”, expresó Rodríguez.
Asimismo, el consultor financiero indicó que el encaje legal actualmente está en 93% y ha significado prácticamente la desaparición de crédito corporativo.
“De cada 100 bs.S que la Banca es capaz de captar, solamente tiene 7 para prestar, los otros 93 van directamente al encaje de la Banca Central de Venezuela”
Rodríguez sostuvo que la intermediación bancaria se ha desnaturalizado, prestando solo el 7% de las captaciones y no está realizando una actividad de intermediación bancaria en sí, como debería.
Esto, aunado a la descentralización del dólar, comienza a marcar un patrón de comportamiento totalmente diferente al considerable según lo indicó el socio de Pwc Venezuela.
También mencionó que la necesidad del crédito para expandir operaciones y financiar capital de trabajo es una necesidad continua de todas las empresas.
“Las empresas tienen que tener dos ideas: la marca y el propósito, sin la necesidad de acudir a cualquier préstamo inseguro”