La Cámara de Caracas hace público su más categórico rechazo al intento frustrado por fracturar nuestra constitucional y legítima Asamblea Nacional.
Junto a la violación de sus instalaciones, un minoritario grupo desconoció públicamente las normas y procedimientos de la propia Asamblea Nacional, atropelló a los diputados que conformarían la primera sesión legislativa para el período 2020-2021, y realizó al final una anti histórica actuación proclamándose ilegalmente como sus supuestas máximas autoridades.
La Cámara de Caracas quiere destacar que el desconocimiento, ruptura y destrucción de las instituciones republicanas, democráticas y legítimas de nuestra sociedad representan un daño irreparable para el futuro inmediato de Venezuela, generando más retraso, pobreza, alejándonos de las instancias de bienestar y prosperidad que caracterizan a la mayoría de las naciones del mundo.
Solo bajo el imperio de la ley, con la existencia y seguimiento de normas y procedimientos, con el estímulo a la concordia y el trabajo en conjunto, es que podemos definir y poner en marcha planes y proyectos que le reporten a la familia y a la población venezolana en general, nuevas oportunidades: trabajo seguro y creativo, alimentación sana y abundante, bienes y servicios que sin discriminación alguna satisfagan a toda la población y caminos hacia la instauración de una sociedad que participa en paz de los procesos de innovación, generación de conocimientos, producción, tecnologías y cuido de nuestro medio ambiente.
Venezuela requiere con urgencia insistir en la senda que señala la letra de nuestra Constitución. Todos ganamos respetando la vigencia y civilidad de las instituciones. Todos perdemos si apelamos a la mentira, a la violencia y a la violación fragante de los derechos humanos.
La Cámara de Caracas hace votos para que nunca más hechos de esta trascendencia política e institucional vuelvan a ocurrir, a la vez que expresa público reconocimiento a todos los hombres y mujeres que asumieron con valentía y sentido de éxito una posición de riesgo y peligro a los fines de impedir la desaparición de nuestro legítimo Poder Legislativo.
Lea también: