Para el director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello, Benigno Alarcón la gira internacional del presidente de la Asamblea Nacional Juan Guaidó, está permitiendo “resetear el juego político frente al gobierno de Nicolás Maduro”, quien pretendía “demostrar la vulnerabilidad” del líder opositor.
Durante su participación en el espacio Análisis de Entorno, Alarcón destacó que, con el recibimiento dado al jefe del Parlamento nacional en el exterior, se envían dos mensajes claros: Guaidó es el centro de gravedad por la lucha de la democracia en Venezuela y el gobierno no se encuentra en completo control para debilitarlo.
“Obviamente, la única ganancia que tenía el gobierno era mostrar la vulnerabilidad de Guaidó. Que no significaba nada y estaba a la merced de lo que desde Miraflores se le permitía hacer”, señaló. “Se produce su salida hacia Colombia y el mundo entero lo recibe como jefe de Estado”.
“El discurso y otras reacciones oficiales muestran la enorme incomodidad del gobierno con toda la situación. Pensaban que estaban en jaque mate y ahora tienen un retroceso enorme”. Algo que daban como una etapa superada, se les restea el juego y comienzan otra vez”, expresó el analista.
A juicio del politólogo, los intentos del ejecutivo por instaurar una directiva paralela presidida por el diputado Luis Parra serían para acceder a financiamientos que solo pueden ser aprobados por el órgano legislativo y asegurarse un Consejo Nacional Electoral bajo su control.
“El gobierno necesita de la asamblea para aprobar cosas que al mismo gobierno le interesa. La oferta hecha por la CAF, por ejemplo (…) Eso explica en buena medida la desesperación por echarle mano a la Asamblea. La ANC no puede sustituir a la Asamblea en sus funciones”, dijo. “Por otro lado, para nombrar rectores del CNE también la necesitan y no hay forma de hacerlo si dicen que están en desacato”.
Con fotografía de El Carabobeño
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