Azú Pastelería, es un espacio innovador que llegó a las calles de la capital en 2017 con la idea de fusionar productos amazónicos con técnicas de pastelería de vanguardia.

Gracias a una serie de estudios por el mundo, la chef pastelera María Evans se encargó de traer un nuevo concepto aplicando conocimientos únicos y diferentes para cautivar a todo el público, resaltando los sabores de Venezuela.

Un punto de inicio con el tema de los productos amazónicos fue cuando un colega utilizó ingredientes de la región amazónica, despertando en la pastelera la pasión por llevar más allá estos sabores.

Pero también, gracias a Sabores Aborígenes, proveedores de estos productos, el equipo inició con la implementación de técnicas de vanguardia con productos locales, como lo es el túpiro, con una textura terciopelada y un crocante de hormiga limonera.

En 2017 María, fundó Azú Pastelería, que funcionó por más de 3 años en un pequeño local de 60 m2 en San Bernardino, ofreciendo únicamente servicios de catering y cursos.

Hace un año exactamente decidieron alquilar la quinta piragua donde funciona Azú ahora, días después anuncian la cuarentena en Venezuela, donde se pensó incluso, en desistir del proyecto.

Pero como buenos venezolanos apostando a lo propio, abrieron sus puertas el 19 de noviembre y pasaron de ser 7 a 47 trabajadores.

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